Contexto Macroeconómico

23.04.2022

La economía americana viene en un proceso de recuperación económica sostenida, habiendo cerrado el 2021 con un crecimiento de 5,5%, habiendo superado ampliamente el nivel pre pandemia. A su vez, el mercado laboral se encuentra recuperado y los mercados bursátiles vieron un mejor mes en marzo con el S&P 500 habiendo subido un 5,2%, recortando la caída del año en 3pp respecto a febrero.

Lo que hay que saber:

  • Los indicios sobre el futuro de la economía plantean ciertos riesgos, con niveles de inflación muy elevados que van a inducir a la Reserva Federal (Fed) a tener políticas más agresivas de aumentos de tasas de interés. El dato de marzo fue el más elevado desde 1982, con la variación mensual en 1,2% y la interanual en 8,5%, 0,6 puntos porcentuales (pp) por encima de febrero. A la dinámica inflacionaria previa se suma la guerra en Ucrania, generando un aumento fuerte en los precios de la energía y los alimentos, que se vieron reflejados en los datos de marzo, con un aumento interanual del 32,0% y del 8,8% respectivamente. Observando las previsiones de marzo de la Fed, el organismo aumento sus expectativas del 2,7% al 4,1% para este año, llegando al objetivo del 2% recién en 2024.
  • A la par de esto, la rigidez del mercado laboral también son señales para la Fed de que hay lugar para llevar a cabo políticas más agresivas.El dato de desempleo situó la cifra en 3,6%, llegando ya a valores pre pandemia, por lo que se considera que hay pleno empleo. Igualmente, la cantidad de trabajos creados se situó por debajo de las expectativas de mercado, señalizando que mucha de la fuerza laboral todavía no ha salido a buscar trabajo después de la pandemia. Los analistas coinciden en que el mercado laboral se encuentra sumamente rígido en el momento, habiendo muchos problemas de oferta de trabajo. Según estimaciones privadas, hay 5 millones más de puestos laborales disponibles que personas buscando trabajo, el dato más alto de la historia. Esta rigidez lleva a que el nivel salarial aumente a medida que se genera competencia por parte de los empleadores para conseguir empleados lo que podría agregar presión al nivel de precios. Los salarios en marzo aumentaron un 6% interanual en promedio, muy por encima del 2,5% promedio de pre pandemia.
  • Ya la Fed ha comenzado a dar indicios de una política monetaria más agresiva tras el aumento de 0,25% en la reunión de marzo. Según las estimaciones del ente, se pueden esperar seis aumentos más para el año, llevando la tasa de referencia a 1,9%. Igualmente, en las minutas que se difundieron el 6 de abril, el Directorio dio a saber que la preocupación central del ente es el nivel elevado de inflación, y que esperan subir las tasas de manera más agresiva a futuro, ya dando por hecho que en mayo el aumento será del 0,5%. Citando la dinámica inflacionaria elevada y la rigidez del mercado laboral, los miembros de la Fed coincidieron también que ya en mayo se debe comenzar el desarme del balance del Banco. Se ve como posible pauta que se dejen vencer 90 mil millones de dólares por mes en títulos sin hacer una renovación. Tomando esto en cuenta, para lo que reste del año es probable que la Fed tome una postura más dura de la originalmente prevista.
  • Este aumento de tasas junto con el proceso expansionaría de la economía, la inflación elevada, y el mercado laboral rígido estaría dando indicios de una desaceleración e inclusive una posible recesión en 2023. Por un lado, la Fed recortó la previsión de crecimiento de 4% a 2,8% para el 2022, y el ex secretario del tesoro Summers ve una recesión en 2023 como un hecho. Justamente, dos escenarios muy posibles para la economía americana son negativos para el crecimiento. Por un lado, si la Fed decide no tomar una postura tan agresiva, la aceleración de la inflación podría inducir una recesión causada por perdida real de los salarios. Esto se observó en los datos de consumo de febrero, habiendo aumentado solamente un 0,2% respecto a enero, con una caída fuerte en bienes durables y una fuerte rotación de consumo hacia energía. Por otro lado, si la Fed busca controlar rápidamente la inflación con aumentos de tasas esto encarecería el crédito induciendo una recesión. Un mercado cuyos efectos ya están viendo es en el inmobiliario, con la tasa de interés de las hipotecas en 5%, ya en niveles del 2018, induciendo a compras adelantadas de inmuebles en enero, con una muy posible caída de transacciones a futuro.
  • Por ende, a pesar de que la economía americana continua en un proceso solido de recuperación, ya comenzamos a ver indicios de una desaceleración y una posible recesión a futuro. Esto es a causa de los niveles altos de inflación y el desempleo bajo que podrán llevar a una Fed más agresiva de lo prevista.